ContraPunto | Eduardo Santos
25 de febrero de 2020.- En el Centro de Empoderamiento para las Mujeres de Saltillo no hay justicia los domingos, por más urgente que sea el caso, así lo denunció la abogada Brenda Zavala a través de su página en Facebook “Hablando Derecho Consultores”, por lo sucedido en el caso de Arel, una mujer violentada, justo en día domingo.
“No se le da la atención correcta a la mujer que ha sufrido violencia, por ejemplo, a una amiga su ex esposo la violentó el domingo por la mañana, ella acudió como muchas otras mujeres lo hacen a levantar su denuncia, sin embargo, como a muchas otras mujeres le dijeron que los domingos la justicia no trabaja, porque no hay quien notifique una orden de restricción”.
La abogada explicó que hay otro caso en el que pese a amenazas de muerte a la mujer le dijo el Ministerio Público que esto no era un delito grave y que lo notificara la Policía, pero el caso se presentó el 20 de noviembre del año pasado y hasta la fecha no se han notificado las medidas de protección hacia esta persona.
Zavala de la Peña expuso el caso de Arel, una mujer que denunció que fue agredida y pide el apoyo social de las mujeres que han pasado por violencia y se han quedado con los trámites en el aire porque el Ministerio Público dice que no es grave o simplemente por la lentitud del sistema judicial.
“El día domingo 23 de febrero, por la mañana, acudí al Centro de Empoderamiento de la Mujer, se levantó mi denuncia, al yo narrar todos mis hechos, me dijo que hacía de mi conocimiento que el día domingo no se le podía notificar, al yo regresar a mi casa, mi ex pareja regresa a mi casa y fui golpeada por él y toda su familia, incluso los incitaba de que yo me merecía eso y más”, narró Arel, con lágrimas en los ojos y voz entrecortada.
Ante los hechos, Arel comentó que llamó a la Unidad de Integración Familiar y acudieron al domicilio de la mujer, sin embargo, la mujer que la atendió le dijo que la denuncia estaba levantada por intimidación y como era domingo y no estaba notificado, el documento no era válido.
“Yo misma le dije: ‘o sea, que es domingo y me pueden matar ¿y no procede? En presencia de Unif lo dejaron entrar a mi casa, para que recogiera sus cosas, se llevó mi carro y he estado viniendo para levantar mi denuncia y me lo he topado aquí, es una persona grosera, viene y les grita a todos y nadie dice nada”.
La mujer también denunció que le han puesto trabas para que su denuncia no siga adelante, ¿quieren una mujer muerta más? Cuestionó, llorando.
La abogada Brenda Zavala mencionó que los policías debieron llevarse detenido al hombre en el momento, por la flagrancia, sin embargo, lo dejaron tomar fotografías y entrar al domicilio por sus cosas.
“Es indignante ver cuántas mujeres más, si el Centro de Empoderamiento hubiera hecho su trabajo desde la primera vez que vino Arel, ese domingo en la mañana y hubieran realizado como deben ser sus protocolos, no hubiera pasado la agresión que sucedió en la tarde, porque él llegó acompañado de su familia”.
La abogada agregó que el hombre no tiene lugar de residencia y que él y su familia son originarios de Tampico, Tamaulipas y Unif le autorizó que entrara al domicilio y le quitara el resultado de años de trabajo, ya que Arel se dedica a vender productos para bajar de peso, mismos que envía a diferentes puntos de la República.
Arel explicó que Ariel, su ex pareja llegó gritándole al Ministerio Público, pero que jamás se notó alguna autoridad en el lugar.
La abogada destacó que Arel corre un gran riesgo debido a la falta de atención de las autoridades en casos como el de ella.